Como un reto, con ilusión y ganas de aportar nuestro granito de arena a una sociedad científica consolidada como es la Sociedad Andaluza de Angiología y Cirugía Vascular. El objetivo pasa también por aunar esfuerzos, evitar desafecciones e integrar a todos los profesionales de la cirugía vascular andaluza, para que tanto los compañeros de la pública como de la privada se vean representados, tengan un papel activo y, entre todos, podamos hacer de la SAACV una sociedad, como hasta ahora ha sido, fuerte y con representación en otros estamentos.

 

 

Potenciar las relaciones institucionales, de modo que consigamos una distribución homogénea de los recursos humanos y materiales entre las distintas unidades y servicios de cirugía vascular de Andalucía, para que la cirugía vascular sea, en sí, homogénea en todo el territorio andaluz; luchar contra el intrusismo de otras especialidades; estrechar los vínculos entre los miembros de la SAACV, estimular a los residentes con la creación de unidades docentes, o intensificar nuestra labor de comunicación y divulgación, con el fin de otorgar mayor visibilidad a nuestra labor y así poder sensibilizar a la población sobre la releva ciais de las patologías vasculares. 

 

 

Una Junta Directiva que representa un notable relevo generacional. De un total de 12 personas, quedamos cuatro un poco más mayores que trataremos de transmitir a los jóvenes nuestra experiencia, pero son las generaciones futuras -mejor dicho, ya presente- las que asumirán un rol más activo y representativo en el seno de nuestra sociedad científica. 

 

 

Ciertamente, como relaciones esenciales. Es fundamental estrechar las líneas de colaboración con la administración, retomar las relaciones institucionales paralizadas por la pandemia y consolidar el papel consultivo de nuestra sociedad científica, como referencia en nuestro ámbito. Nuestro objetivo, al fin y al cabo, es luchar por el bien de nuestros pacientes y del conjunto de la sanidad andaluza. Lo haremos con firmeza, pero sin crispación alguna. Nuestro trabajo hablará por sí sólo de lo que queremos y a lo que aspiramos. Como ha quedado patente en nuestro Congreso de Jaén, creo que se ha abierto una vía muy interesante con la administración, tal y como se constató con la presencia del director general de Gestión Económica y Servicios del Servicio Andaluz de Salud, José Antonio Miranda.

 

La industria es otro pilar importante. Es nuestro objetivo potenciar la realización de estudios y registros de pacientes, avalados por la SAACV. Poner en valor qué hacemos y cómo lo hacemos, y para lo que contaremos con el apoyo de la industria. 

 

 

Una sociedad económicamente saneada, estructuralmente bien definida, pero que tiene que adaptarse a los nuevos tiempos. La pandemia nos ha enseñado que hay cosas a mejorar. Hay que modernizarla, pero sin olvidar de dónde venimos. Dar mayor cabida a adjuntos y residentes, potenciar el uso de las nuevas tecnologías de comunicación. 

 

 

Nuestra especialidad está consolidada y goza de buena salud como referente en el tratamiento de patología vascular. Excepto en Córdoba, está presente en todas las provincias. No obstante, hacen falta más compañeros, hay que incrementar la dotación de recursos humanos de algunos servicios (Cádiz y Jaén, fundamentalmente, donde la ratio de especialistas es corta). Nos consta que desde el SAS se está trabajando por mejorar esta situación. Perseveraremos en ese sentido.

 

 

Desde el punto de vista clínico, el abordaje de los territorios frontera y el tratamiento del pie diabético en todas las provincias, que seamos sensatos en el consumo y utilización de recursos sanitarios,perseverar en la formación y el incremento de unidades docentes de residentes como forma de expresar nuestra vocación y labor científica, y que se doten de forma equitativa a todas las unidades y servicios de nuestra región. 

 

 

Que nos podamos seguir viendo todos en los congresos y reuniones, que intercambiemos experiencias y conocimiento para enriquecernos como personas y especialistas. Y saber amoldarnos a los nuevos retos continuos que nos plantea nuestra sanidad. Que nos sintamos todos, como me pasó al principio de iniciar la especialidad y entrar en la SAACV, parte de una gran familia en la que todos seamos escuchados y acogidos.