Nos acercamos al fin de 2023. ¿Qué balance hace de este año y, en especial, del 38º Congreso? 

Dado que nuestro Congreso suele celebrarse siempre en las últimas semanas del año, es para nosotros la mejor ocasión para hacer balance. Si el del año pasado supuso la vuelta a la normalidad tras los años marcados por la COVID-19, en esta ocasión se ha consolidado la vuelta a la normalidad y a los números previos a la pandemia. Eso es algo muy importante, ya que una cita como ésta es necesaria para la puesta en común e intercambio de opiniones y experiencias, y no sólo con compañeros de toda Andalucía, sino también de otras comunidades e incluso de otros países.  

En 2023 hemos sido testigos de la consolidación que está tomando nuestra especialidad en Andalucía gracias al significativo incremento del número de residentes. Una gran noticia que debe servirnos de estímulo para ofrecer a esos compañeros más jóvenes una mejor formación y la posibilidad de crecer como profesionales sanitarios en un entorno colaborativo y de compañerismo como el que propicia una sociedad científica como la SAACV. Es por ello por lo que nuestro Congreso, desde el año pasado, ya incluye una jornada precongresual dedicada a ellos para que puedan acceder a una formación complementaria de primer nivel, exponer sus inquietudes y proyectos y poder intercambiar impresiones. Asimismo, cabe destacar que en este año hemos conseguido recuperar la beca para una estancia en Abano Terme, gracias a la colaboración de Abbott.

Entre los contenidos tratados en la cita celebrada en Sevilla, destacaría de forma especial las mesas, que son un pilar fundamental de nuestros congresos, y que en esta ocasión nos permitieron profundizar, por un lado, en el abordaje del trauma vascular, desde el uso de técnicas endovasculares, el papel de las técnicas de embolización en el traumatismo con afectación vascular hasta la cirugía abierta o el trauma infantil, en las que contamos con la participación de los doctores Herón Rodríguez e Ignacio Chavarría por video conferencia desde Chicago y Costa Rica.

La segunda mesa profundizó en la disección de aorta,  un tema apasionante por lo que supone como patología que aún no llegamos a comprender en toda su dimensión. Muy enriquecedoras las intervenciones de los compañeros participantes y, de forma especial, la del Dr. Antono Puppo, médico intensivista del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, que nos aportará un enfoque poco habitual exponiendo sus estudios sobre las bases genéticas de esta enfermedad.

Nos centramos ahora en el año que acabamos de comenzar. ¿Qué proyectos plantea la SAACV para 2024?

Uno de los nuestros principales objetivos pasa por consolidar a la SAACV como una sociedad fuerte, más grande y con un diálogo más fluido con la administración para así trabajar juntos por la equidad de los recursos humanos y materiales en las distintas provincias. También queremos que nuestras reuniones ganen continuamente en calidad e interés formativo para nuestros socios. Es un tema que hemos llevado a nuestra última asamblea y queremos que se materialice ya en la próxima reunión de primavera.

Antes hicimos mención a la COVID-19. Este año se ha decretado el fin de la pandemia. ¿Se ha conseguido recuperar en nuestros servicios y unidades el nivel de actividad previo a la pandemia?

No hemos conseguido recuperarla, fundamentalmente, por la falta de profesionales, especialmente en provincias como Jaén o Huelva. Nos consta que muchos servicios han tenido que hacer un sobreesfuerzo para poder atender las interveciones programadas. Nuestro propósito es poder abordar con la administración esta situación y plantearles las soluciones que proponemos los propios profesionales. 

¿Qué aspectos le gustaría al presidente de la SAACV que se mejoraran en las unidades y servicios de nuestra región?

Entre las prioridades, acabar con la desigualdad de plantillas e hipertrofia de algunos centros. Queremos una estabilización de plantillas en función de la población a la que atienden y tratan. Hace falta un trato justo para incentivar a los profesionales, ya que aquellos que no se sienten estimulados se marchan a otras comunidades. 

¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta nuestra especialidad?

Nuestra especialidad vive en una constante evolución determinada por el continuo avance tecnológico y, por ende, de técnicas de abordaje. Gracias a ello debemos dar nuevos pasos en ámbitos como el abordaje de la patología diabética, en miembros inferiores, trabajar con mayor precisión en los niveles distal y proximal y mejorar destrezas en el uso de las nuevas endropótesis de aorta. 

Nuestra aspiración es que ese desarrollo tecnológico y de destrezas profesionales se ofrezca de manera igualitaria a todos los centros de nuestra región, para que puedan avanzar de forma equitativa.